Los recientes Juegos Panamericanos Lima 2019 no solo quedarán en la historia por ser considerados como los mejores juegos de la historia, sino por los números positivos que dejaron como los 2 mil puestos de trabajo generados en las 302 pequeñas y micro empresas que prestaron servicios a este megaproyecto público.

Así lo sostuvo Carlos Neuhaus, Presidente del Comité Organizador de los Juegos Panamericanos Lima 2019, en la conferencia “Los Juegos Panamericanos como caso de éxito de gerencia pública”, organizada por la Escuela de Posgrado de la Universidad Continental.

Fue enfático al señalar que “han sido uno de los pocos Juegos que terminaron por debajo del presupuesto asignado porque tuvo como mística la búsqueda permanente del ahorro”. Recordó además que los Panamericanos y los Parapanamericanos le dieron al país un total de 39 medallas, 36 atletas clasificados a las Olimpiadas de Tokyo 2020, 720 mil espectadores, así como cinco nuevos complejos deportivos.

Carlos Neuhaus sostuvo que una de las claves para que todas las obras llevadas a cabo por su gestión se hicieran en el plazo previsto fue porque desde el inicio coordinó con la Contraloría General de la República para un acompañamiento permanente a cada una de las obras, a fin de ir resolviendo los problemas que se presentaran en el camino.

Al respecto, el Contralor General de la República, Nelson Shack, sostuvo que el mecanismo de control empleado para la ejecución de los Panamericanos fue el de “control concurrente”, que permitió ir corrigiendo las observaciones durante la marcha del proyecto.

“Si hubiéramos aplicado los modelos de control tradicional seguramente las obras se habrían paralizado varias veces. Sin embargo, en el modelo de control concurrente hay un acompañamiento multidisciplinario y sistemático en donde los equipos de forma transparente se ponen de acuerdo y corrigen”, puntualizó.

Finalmente, Shack advirtió que “no todos los proyectos podrían ejecutarse con el modelo de los Panamericanos. No se puede; materialmente es imposible. Pero, no cabe duda que, para los grandes proyectos de infraestructura, la ruta parece estar clara”.

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