Al cumplir sus primeros 100 días como presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, anunció un aguinaldo especial para los sectores más pobres de ese país, que actualmente reciben subsidios del estado.

Bolsonaro confirma además que mantendrá el programa Bolsa Familia, creado en el 2003 por el entonces presidente, Lula da Silva, con la variación que ahora recibirán el anunciado aguinaldo adicional.

En su discurso por sus 100 en el cargo, Bolsonaro sostuvo que pretende “la valorización de la familia y los valores cristiano, promoviendo una educación de calidad y sin matices ideológicos”.

El programa Bolsa Familia, fue considerado por la ONU y otros organismos internacionales, como el “mejor plan de distribución de renta en el mundo”, pues ayuda a mejorar la calidad de vida de las familias en extrema pobreza.

Casi 14 millones de familias reciben unos 50 dólares mensuales, como parte del subsidio del gobierno de Brasil, y a cambio asumen el compromiso de enviar a sus hijos a las escuelas.   

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