Al menos 120 viviendas de Santa Eulalia y Cashahuacro, en la provincia limeña de Huarochirí, han quedado inhabitales producto de la caída de huaicos, mientras que otras 100 colapsaron, aunque podrían recuperarse, informó el Centro de Operaciones de Emergencia del Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci).

En un reporte emitido hoy sobre la evaluación de los daños en Huarochirí, se informa que los huaicos que cayeron el último lunes dejaron 30 heridos en Santa Eulalia y otros 30 en Cashahuacro. Las familias damnificadas en ambos lugares suman 220 y las viviendas afectadas (que siguen en pie y solo es necesario limpiarlas) bordean el centenar.

El mismo documento refiere que hay dos colegios y dos centros de salud afectados, y que hay 50 casos en los que se reportó desagües afectados (Santa Eulalia), así como 30 problemas de energía eléctrica (Santa Eulalia).

Los daños son producto de la activación de la quebrada Cashahuacra, Nueve de Octubre, Cupiche, Buenos Aires, por donde discurrió el agua y el lodo que no solo afectó viviendas sino vías de comunicación en la provincia de Huarochirí, añade la información.

A esta zona el gobierno regional de Lima ha desplegado centenares de camas de metal plegables, colchones, frazadas, baldes de plástico, picos y palas para limpiar el lodo. Asimismo, tanto el gobierno regional como la comuna provincial han enviado volquetes, retroexcavadoras y cargadores frontales para apoyar las labores de limpieza de las vías de comunicación y el encauzamiento de las quebradas.

Esta situación ha llevado al alcalde de Huarochiri, Abel Arteaga, quien pidió a las autoridades del gobierno central ayuda para sus vecinos. "Santa Eulalia también está en emergencia porque el desastre ha sido total: necesitamos ayuda para limpiar las casas afectadas", señaló.

/CCH/ Andina