“Que un libro guste a 30 chicos de un salón, me parece muy difícil. “Esto de haber escolarizado o dado la tarea al colegio de formar lectores es un poco complejo”, sostiene la líder del Proyecto Biblioteca de la Confianza, Josefina Jiménez.

Para la educadora, en algunas instituciones educativas desde mucho antes, se ha relacionado a la lectura con el castigo y eso a su entender, es un gran problema.

“El hábito se deforma mucho, el colegio es la primera institución en la que los niños y niñas pueden tener contacto con los libros y la lectura, a veces esta relación, se acaba deformando por cómo se va llevando y por las estrategias que se van implementado”, refirió en A todo Parlante en Nacional.

En ese sentido, dijo que cuando la lectura se circunscribe solo al entorno escolar, tiende a deformar lo que podría ser una relación bonita con los libros, porque te obligan a leer y te preguntan para el examen.

“Hay muchas personas que me dicen que cuando eran niños los mandaban a la biblioteca como castigo, debemos entender que cada niño tiene su ritmo de lectura, tenemos que mostrarles una variedad de libros y no solo uno y a eso apunta una Biblioteca Educativa”, sostuvo.

Para Jiménez es importante que los niños exploren sin miedos, que los padres introduzcan los libros como jugando para afianzar en ellos un mundo de imaginación y creatividad.

“Creo que estandarizar algo no viene bien, no a todas las personas les gusta la misma música, el mismo baile y ello pasa con los libros; entonces, es una suerte de ir experimentando también”, dijo la docente.

D.B.D.