El gobierno aprobó declarar el estado de emergencia a nivel nacional por 30 días, en respuesta a las protestas sociales en diversas regiones del país, y antes del fin del día se determinará si esto implica el toque de queda, adelantó el ministro de Defensa, Alberto Otárola.

En declaraciones a los periodistas en Palacio de Gobierno, en un paréntesis de la sesión del Consejo de Ministros, el ministro Otárola dijo que el estado de emergencia implica la suspensión de los derechos de reunión, inviolabilidad de domicilio, libertad de tránsito, libertad de reunión y la libertad y la seguridad personales.

¿Esto implica el toque de queda? Preguntó un periodista al ministro. “Existe esa posibilidad que la vamos a definir el día de hoy”, fue su respuesta.

Explicó que, al amparo de este marco legal, la Policía Nacional del Perú mantendrá el control del orden interno, con el apoyo de las Fuerzas Armadas, tras señalar que la norma respectiva con dicha disposición saldrá publicada en una reunión extraordinaria del Diario Oficial El Peruano.

“En consecuencia, la Policía Nacional, con apoyo de las Fuerzas Armadas, va a asegurar el control de todo el territorio nacional, de los bienes personales y sobre todo de la infraestructura estratégica y la seguridad de todos los peruanos”, indicó.

Refirió que la ciudadanía debe tener “la seguridad y la certeza de que primero controlamos el orden interno, y luego vamos a asegurar el libre tránsito y la paz para todos los peruanos”.

La medida anunciada por el ministro ya había sido adelantada ayer por la presidenta Dina Boluarte, cuando informó que esto será parte de la agenda en la reunión que sostuvo este martes con el Presidente del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, y el Estado Mayor de los institutos castrenses y Policía Nacional.

Hasta ahora tres regiones estaban en emergencia en respuesta a las protestas sociales. Ellos son Apurímac, Arequipa y Cusco, a la que se sumó la red vial nacional para despejar las carreteras y garantizar el libre tránsito de las personas.

Asimismo, se mantienen cerrados, también por amenazas de violencia, los aeropuertos de Andahuaylas, Arequipa, y Cusco, y desde esta mañana el de Juliaca (Puno). 

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