El presidente del consejo de ministros, Gustavo Adrianzén, hizo un llamado a las fuerzas políticas para que dejen de lado sus diferencias y colaboren en favor del bienestar del país, en el marco de la celebración del bicentenario de la batalla de Junín.

“Desde la gloriosa Pampas de Junín, hago un llamado a cada uno de los peruanos y peruanas para que sigamos el ejemplo de nuestros héroes de la batalla, depongamos nuestras diferencias. Luchemos por una gran Nación. Por la Nación que nuestros hijos merecen, por la libertad, por la justicia social por la igualdad de oportunidades pongamos punche Perú”, declaró Adrianzén.

El premier estuvo acompañado junto a los ministros de Defensa, Interior y Cultura, así como por el presidente del Congreso y el defensor del Pueblo, participó en la ceremonia realizada en el Santuario Histórico de Chacamarca. Adrianzén destacó la importancia de la batalla en la consolidación de la independencia del Perú y de toda la región.

Además, el ministro Adrianzén anunció una serie de proyectos priorizados para la región Junín, entre ellos: el puente Nació Asháninca en Satipo, el Instituto Santiago Antúnez de Mayolo en Huancayo, la red de banda ancha para toda la región, y el recientemente reinaugurado Aeropuerto de Jauja, así como una nueva escuela bicentenario en Chupaca.

Por su parte, el presidente regional Zósimo Cárdenas subrayó la necesidad de unidad para enfrentar lo que denominó los nuevos enemigos: “Hoy tenemos enemigos como la anemia, la pobreza, la inseguridad y la corrupción. Necesitamos vencerlos con el legado más importante de hace 200 años, con esa unidad que tanto esperamos”, preciso.

Durante la ceremonia, se colocaron ofrendas florales en honor a los héroes de Junín y se develó una placa conmemorativa por el bicentenario de esta importante batalla. El desfile cívico-patriótico fue encabezado por el glorioso Batallón Húsares de Junín, que vistió su tradicional uniforme azul y rojo.

Finalmente, cabe resaltar que, escolares de entidades educativas de la región participaron en la ceremonia, que se realizó a un grado de temperatura en estas pampas situadas a 4,000 metros sobre el nivel del mar.

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