La Defensoría del Pueblo insta a las autoridades del Ministerio de Energía y Minas (Minem) a buscar una solución definitiva ante la grave situación de contaminación permanente que se presenta desde hace más de cinco años en las cuencas de los ríos Coralaque y Tambo, lo que viene afectando la calidad de vida de los pobladores de las provincias de Islay, en Arequipa; y General Sánchez Cerro, en Moquegua.

En este sentido, se exhorta a dicha entidad a acelerar las acciones necesarias para el cierre definitivo de la Unidad Minera Florencia Tucari, que constituye la principal fuente de contaminación en ambas cuencas.

De acuerdo al seguimiento que realiza la institución en este caso, desde 2019 se ha emitido un total de diez declaratorias de emergencia debido al peligro inminente que representa la contaminación de estas cuencas. La más reciente prórroga, oficializada hace pocos días mediante Decreto Supremo 102-2024-PCM, extiende nuevamente el estado de emergencia en varios distritos de las dos provincias.

Al respecto, la adjunta de Medio Ambiente, Cambio Climático y Pueblos Indígenas de la Defensoría del Pueblo, Rosa Chacón, explicó que la inclusión de ambos departamentos en las declaratorias conjuntas es lógica, debido a que el río Coralaque, que se origina en Moquegua, es un tributario esencial del río Tambo.

“La contaminación que afecta al Coralaque tiene un impacto directo en la cuenca del Tambo, lo que justifica la necesidad de intervenir en ambas regiones para abordar este grave problema ambiental y de salud pública”, precisó.

No obstante, la representante de la Defensoría del Pueblo advirtió que, si bien las declaratorias de emergencia han sido necesarias, para mitigar los riesgos inmediatos es fundamental implementar soluciones sostenibles que aborden de manera definitiva las causas subyacentes de la contaminación.

Finalmente, advirtió que el cierre definitivo de la unidad minera constituye un paso importante para que se garantice el cumplimiento del resto de compromisos asumidos en agosto de este año, durante la mesa de diálogo de Coralaque, referidos principalmente a la remediación de las zonas impactadas y la atención de la salud de la población afectada.

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