La idea de que las mujeres somos débiles, frágiles y siempre necesitamos a alguien del sexo opuesto para ser felices es un prejuicio que en los últimos 20 años está desapareciendo.

Así lo consideró la psicoterapeuta Katherin Marcos al explicar cómo se pueden desmitificar los estereotipos de género entre hombres y mujeres con el fin de lograr una sociedad más igualitaria.

 “Nosotras tenemos facilidad y autonomía y estas cualidades debemos irlas  incluyendo en nuestras expresiones y comportamientos”, sostuvo Marcos en “A todo parlante”

Agregó que las mujeres desde el hogar pueden cuestionar ciertos comportamientos que están normalizados y son machistas. “Por ejemplo, en una comida primero hay que servir al padre y a los hombres de la casa o las mujeres deben cocinar y los hermanos o hijos no pueden hacerlo”, indicó.

Sobre este último punto, no obstante, Katherin Marcos resaltó que estos estereotipos están cambiando y ahora se ven a hijos que apoyan en los quehaceres de la cocina. “Empezamos a ver, desde una perspectiva psicológica, que las ideas empezaron a transformarse”, dijo.

Por ello, puntualizó que los cambios empiezan a partir del diálogo entre las diferentes partes. “Si yo veo una diferencia en casa, tengo que hablarla. Todo empieza desde nosotros mismos y debemos empezar a comprender que las tareas deben ser compartidas”, remarcó Marcos.