La Policía Nacional brindará seguridad, sin armas; ni caballería; ni canes, en la marcha convocada para hoy por grupos de jóvenes para manifestarse en contra del régimen laboral juvenil, y la vigilancia estará a cargo de 500 mujeres policías con guantes blancos en señal inequívoca de que no se pretende reprimir una protesta pacífica.

Así lo informó el ministro del Interior, Daniel Urresti, quien dijo que debemos mostrar al mundo que en el Perú somos lo suficientemente maduros "para hacer una protesta pacífica".

Señaló que por indicaciones del presidente de la República y por tratarse de una protesta excepcional, se han dictado medidas especiales como eximir a los convocantes a esta marcha de los permisos necesarios para realizar ese tipo de desplazamientos.

Urresti detalló que el ingreso a la Plaza San Martín y al Campo de Marte, lugares de concentración de los manifestantes será filtrado.

"Esto quiere decir que se pedirá DNI para evitar que ingresen delincuentes, requisitoriados, miembros activos de Sendero Luminoso o del Movadef", dijo Urresti.

Agregó que quienes participen en la marcha no podrán portar mochilas, capuchas, pañoletas para cubrirse el rostro, ni tampoco objetos contundentes o agua en botella de vidrio.

Recordó que el Centro Histórico de Lima es zona rígida para manifestaciones desde hace mucho tiempo por lo que no está permitido el ingreso a esa parte de la ciudad.

"Permitirlo (el ingreso de manifestantes) en esta época donde hay mucha gente haciendo sus compras por Navidad sería un suicidio", remarcó Urresti.

El titular del Interior indicó que para garantizar la tranquilidad de la ciudad durante la marcha convocada para las 17:00 horas de hoy se destinarán unos 8,000 mil policías, para lo cual se tendrá que sacar a los efectivos de las comisarías, como cuando se realiza un partido de fútbol que reúne a mucho público.

/B.B.V./