La institucionalidad en el Perú está “destrozada” desde el “golpe” que el expresidente Alberto Fujimori dio en el año 1992, cuando decidió disolver el Congreso, señaló el analista constitucional Alberto Borea, en Radio Nacional del Perú.

“La institucionalidad en el país está destrozada desde el golpe de Fujimori en 1992 y desde ahí no se recuperó, porque como consecuencia del golpe no se hizo otra cosa que hacerle un disfraz a Fujimori para su comodidad y pueda seguir gobernando, y quitó el foro de discusión de gran nivel que existía en Perú y que existe en el mundo: el Senado, y Fujimori lo canceló.” Agregó.

Dio estas declaraciones, con respecto al lavado de manos que hicieran ayer diversas organizaciones en el frontis del Consejo Nacional de la Magistratura (CNM), en busca de la destitución de todos sus integrantes pues afirmaron que lo ocurrido con Quispe Pariona pone en duda la institucionalidad del Consejo.

SOBRE VACANCIA DE PARIONA

Asimismo, Borea consideró que no fue acertada la decisión del CNM de vacar al consejero Alfredo Quispe Pariona por “incapacidad moral” el último viernes, cuando cuatro días antes dispusieron archivar su proceso de vacancia, decisión que -según él- surge a raíz del “clamor popular”.

“Según lo que he leído, de acuerdo al derecho, Quispe tiene todos los requisitos para estar en el CNM, pero como hay un clamor popular entonces yo lo saco; eso no es acertado, entonces ¿somos Pilatos?”, dijo.

Asimismo, dijo que el desarrollo de la política en nuestro país debe ceñirse a normas y no a través de “gritos”. “Las leyes son acuerdos que se tienen que tomar en momentos de serenidad para gobernar en momentos de dificultad, no se puede aplicar los gritos sino la norma”, aseveró.

Para finalizar, Borea dijo que en el Consejo debe haber una reforma “integral”; no sólo hacer “parches”, porque a base de remiendos no se arregla el conjunto. “La institucionalidad es un tejido, no sólo un pedazo de tela”, puntualizó.    

/P.A.G./