Tras ser dada de alta esta mañana, la conductora de televisión Sonaly Tuesta expresó sentirse nerviosa y asustada pero feliz por el “nuevo camino” que tiene para poder continuar con su vida y agradeció a las personas que aún sin conocerla le dieron muestras de apoyo durante los 15 días que estuvo en la clínica tras ser afectada por un virus que atacó sus pulmones e hígado.

Ya recuperada la periodista dijo en conferencia de prensa que las dos primeras cosas que desea hacer es dedicarse a agradecer a todas las personas que han orado por ella y también darse un tiempo para “dar abrazos” a quienes no los ha hecho hasta hoy.

“Quiero dedicarme todavía de aquí en adelante a agradecer (…) aún no he visto Facebook, Twitter, he visto muchas cosas, que mis fotos están debajo de la Virgen de la Candelaria, misas diarias en mi tierra. Este tipos de testimonios tengo que agradecer uno a uno porque no pasa así nomás”, manifestó.

“Los segundo a hacer, ese paso, es darme un tiempo, a veces no nos damos tiempo y más los periodistas, un tiempo para dar abrazos que no he dado hasta hoy”, agregó.

Además, dijo que sigue teniendo las ganas de escribir y prepararse para regresar a la televisión. “Este Perú es grande, inmenso, y tiene relatos que se tienen que contar”, subrayó.

SONALY NO SE ENFERMÓ POR VIAJAR

Por su lado, el gerente de la clínica San Gabriel, Amador Vargas, descartó que el virus que contrajo Tuesta se dio en algún lugar que haya visitado producto de la labor que realiza.

“Este problema no ha sido contraído en ningún sitio en especial,  no se ha enfermado por ir  a Huancavelica, Ayacucho, etc., este virus en vías respiratorias se encuentra en todos lados, lamentablemente a ella le afectó y le produjo lo que hacen estos virus severos”, indicó.

“Esto no tienen relación con los viaje que ella ha hecho ni con costumbres o práctica que haya realizado al visitar cuevas, o tomar agua de ríos. No es así”, recalcó.

Para finalizar, Vargas afirmó que la periodista no tendrá secuelas y estará lista para seguir con su trabajo cotidiano en unas semanas.

/PAG/MRM/