James Rodríguez, especialista en temas de extradición, sostuvo que el detenido Alejandro Sánchez Sánchez, dueño de la casa del jirón Sarratea, no ingresó legalmente a territorio norteamericano; por lo tanto, corresponde que sea expulsado de forma inmediata por parte de las autoridades de ese país.

En entrevista a “Dialogo Abierto” de Radio Nacional, comentó que la Procuraduría Anticorrupción, el Ministerio Público a través de la Oficina de Cooperación Internacional, el Ministerio de Relaciones Exteriores y la Interpol Perú, trabajen de manera coordinada para que este personaje pueda ser entregado a la justicia peruana a la brevedad posible.

Rodríguez comentó que la intención de Sánchez, quien se mantuvo en la clandestinidad por 11 meses y es investigado por los presuntos delitos de organización criminal, colusión agravada y tráfico de influencias, era ingresar a Estados Unidos para hacer más difícil su proceso.

Destacó que, en Norteamérica el control de sus fronteras es sumamente cauteloso, especialmente cuando se trata de temas vinculados a corrupción; en ese sentido, el trámite solo tardará unas semanas.

En cuanto al desempeño de las autoridades peruanas, indicó que se deben apersonar a través de Interpol Perú para que se concrete la entrega, y luego que pise territorio peruano, será trasladado a una audiencia de Control de Identidad, posteriormente se realizará un reconocimiento de médico legista y finalmente será puesto a disposición del Instituto Nacional Penitenciario (INPE) para ser trasladado a un penal y cumpla los 30 meses de prisión preventiva, solicitado por el Ministerio Publico.

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